Michael Huber 
LISBOA (AP) — Políticos y dignatarios asistieron el sábado al funeral de Aga Khan IV, el 49º imán hereditario de los musulmanes chiitas ismaelitas, en Lisboa.
Entre los dignatarios que asistieron a la ceremonia privada del sábado para el príncipe Karim Al-Hussaini en el centro comunitario ismaelita estuvieron el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y el rey emérito de España, Juan Carlos. El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el alcalde de Lisboa también estuvieron entre los dolientes.
La comunidad religiosa ismaelita indicó que el príncipe Karim será sepultado durante una ceremonia privada de entierro en Asuán, Egipto, el domingo.
Su fallecimiento fue anunciado el martes por la Red de Desarrollo Aga Khan y la comunidad religiosa ismaelita. Al día siguiente, Rahim Al-Hussaini, de 53 años, fue nombrado como Aga Khan V, el líder espiritual de los millones de musulmanes ismaelitas del mundo, de acuerdo con el testamento de su padre.
El Aga Khan es considerado por sus seguidores como un descendiente directo del profeta Mahoma y es tratado como un jefe de Estado.
El príncipe Karim recibió el título de “Su Alteza” por la reina Isabel en julio de 1957, dos semanas después de que su abuelo, el Aga Khan III, lo nombrara inesperadamente heredero de la dinastía familiar de 1.300 años como líder de la secta musulmana ismaelita.
A lo largo de décadas, el difunto Aga Khan se convirtió en un magnate empresarial y filántropo, moviéndose entre lo espiritual y lo mundano con facilidad. Defensor de la cultura y los valores islámicos, fue ampliamente reconocido como un constructor de puentes entre las sociedades musulmanas y Occidente.
La Red de Desarrollo Aga Khan se ocupa principalmente de cuestiones de atención médica, vivienda, educación y desarrollo económico rural. Afirma que trabaja en más de 30 países y tiene un presupuesto anual de aproximadamente 1.000 millones de dólares para actividades de desarrollo sin fines de lucro.
Los ismaelitas han vivido durante muchas generaciones en Irán, Siria y el sur de Asia antes de establecerse también en el este de África, Asia Central y Oriente Medio, así como en Europa, América del Norte y Australia más recientemente. Consideran un deber donar hasta el 12,5% de sus ingresos al Aga Khan como administrador.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
